Esta fue una de las consultas que se compartió en una reunión en que tomaron parte los distintos equipos diocesanos del Sínodo junto al obispo de Talca, padre Galo Fernández, durante la mañana del miércoles 13 de julio.
La cita se llevó a cabo en las dependencias de Obispado de Talca y tomaron parte en él integrantes del Equipo Ejecutivo, Equipo de Espiritualidad y Equipo de Consenso del Sínodo.
En primer término, el Coordinador de la Vicaría Pastoral, Juan Manuel Cerna, efectuó una presentación retrospectiva sobre los dos Sínodos que se han hecho en la diócesis (1969 y 1989-1992), el proceso de discernimiento iniciado en septiembre de 2018 que desembocó en cuatro signos de los tiempos: La dignidad de la persona, El cambio permanente, El cuidado del planeta y Las nuevas formas de familia. Además, vinculó todo este caminar con el proceso de escucha del Sínodo al cual fuimos convocados por el Papa Francisco en 2021, y de cuyo informe emergieron tres ideas transversales: Fe en Jesucristo, Renovación de las relaciones y las estructuras, y Misión para una Iglesia en Salida.
El tiempo sinodal continúa
Tras esto todos los presentes compartieron su sentir de lo que ha sido este tiempo de escucha diocesano y a la vez se dieron pistas de cómo seguir este camino, teniendo en cuenta que el Sínodo continúa y que como Iglesia debemos estar en constante reflexión y discernimiento, atentos a lo que nos va diciendo el Espíritu Santo.
La hermana Paulina Araya, religiosa del Prado, y que estuvo a cargo del Equipo de Espiritualidad, expresó que uno de los grandes desafíos que tenemos como Iglesia es seguir viviendo este proceso, “es un gran llamado del Espíritu que podamos implementar encuentros, diálogos, abrir nuestras realidades pastorales y abrirnos mutuamente. Estamos retornando de una pandemia y estamos en un proceso en que la Iglesia está viviendo a nivel universal un Sínodo, donde el Espíritu nos pide discernir y escucharnos”.
Por su parte, Verónica Rodríguez, coordinadora del Equipo de Consenso, dijo que de alguna manera u otra se debe “plasmar lo que la gente habló y participó, en una actitud de escucha y humildad, eso las personas lo recalcaron mucho. Creo que el gran desafío es que todo esto continúe”.
El obispo de Talca, padre Galo Fernández Villaseca, aseveró: “Mi convicción es que debemos entrar a trabajar más intensamente en cada una de las materias en concreto. Poner a Jesús en el centro y que nuestra experiencia de comunidad y de vida se nutra del encuentro con Dios y su palabra. También cambios en nuestra manera de actuar, tomar decisiones, hacer actuar los distintos consejos e instancias de nuestra Iglesia. Y todo para que la Iglesia se vuelva más activa, más presente y misionera. En síntesis: estamos en camino”.
El Informe Diocesano del Sínodo está disponible para ser revisado en el siguiente enlace: Informe Diocesano del Sídono
