A pesar del frío que se hizo sentir en nuestra región el pasado 16 de julio, fueron cientos los fieles que acompañaron las diferentes celebraciones que realizaron en honor a la Virgen del Carmen.
Solemnidad de la Virgen del Carmen en la iglesia Catedral
El sábado 16 de julio a las 12:00 horas se realizó la Eucaristía principal en honor de la Virgen del Carmen, donde se agradeció al Señor por la Madre de los cristianos, por los 12 años de la Capilla de Adoración Perpetua de Talca y por sus adoradores, y también por los 17 años de aniversario sacerdotal del padre Marcelo Díaz, párroco de El Sagrario y quien presidió esta Misa. En la celebración se impusieron los escapularios a los cientos de asistentes y se rezó a la Virgen del Carmen, especialmente por nuestro país.
Por la tarde, a partir de las 15:00 horas, agrupaciones de baile y música le bailaron a la Carmelita en la plaza de armas de Talca y posteriormente participaron junto a muchos fieles de la Eucaristía en el templo catedral a las 17:30 horas, donde también hubo danzas y música con una gran devoción al Señor y a la Virgen del Carmen. Al final se impusieron los escapularios a los muchos asistentes a la celebración terminando con la Oración por Chile.
Celebración en santuario El Carmen de Curicó
Pasadas las 10 de la mañana del 16 de julio se efectuó una procesión con la imagen de la Virgen del Carmen por algunas calles de Curicó, para retornar cerca del mediodía al santuario donde se celebró la Misa a la Carmelita.
En su homilía el padre Rodrigo Arriagada Mora, Vicario de Curicó y rector del santuario El Carmen, destacó que esta celebración del 16 de julio era algo que el pueblo curicano esperaba con mucho anhelo: “Muchas veces nos preguntábamos cuándo y cómo volver un poco a la normalidad de expresar que nuestra fe sea un testimonio, y hoy el Señor regaló un hermoso día para testimoniar junto a la Virgen del Carmen su cariño a su Hijo Jesús”.
“Sintámonos hoy a vivir esta realidad de la Virgen del Carmen que está preocupada de la vida del otro. Sintamos que también nosotros nos tenemos que preocupar de la vida de nuestros hijos, de nuestros hermanos, que nos sintamos a ser servidores de otros. Es la fiesta de la Virgen del Carmen y nosotros hoy queremos honrarla en el regalo de la fe”, dijo el padre Rodrigo.
La Hermandad de Anderos del Carmen presentó en la ocasión un nuevo escapulario, el que fue traído por las más pequeñas de la comunidad para que el rector del santuario lo bendijera. Además, los nuevos integrantes de esta Hermandad hicieron juramento para comprometerse a ser fieles servidores de la Madre del Carmelo.
Casi al concluir la Eucaristía la comunidad del santuario quiso testimoniar su gratitud al padre Rodrigo por sus 17 años de sacerdocio a través de un obsequio que fue entregado por sus papás Luis y Marcia. Seguidamente se bendijeron los escapularios que fueron entregados a los presentes al culminar la celebración.
